Cuando a un período de intensa transformación, como es la adolescencia, se suma una crisis de salud mental, el desafío para las familias se intensifica.
Muchos progenitores reaccionan con culpa o sobreprotección, sin embargo, lo más importante es generar un entorno seguro, basado en la comprensión y el acompañamiento desde la compasión. Aunque en ocasiones los adolescentes parezcan rechazar a sus figuras de referencia, su presencia sigue siendo fundamental.
En esta entrevista, el psicólogo Gus Bas, analiza algunas de las problemáticas más frecuentes, como la ansiedad, la depresión y el estrés elevado.
Él explica cómo detectar señales de alerta, desde autolesiones y ausentismo escolar, hasta conflictos familiares persistentes.
También ofrece estrategias para fortalecer el vínculo entre madres/padres e hijos desde la empatía y la curiosidad.
Gus es psicólogo con amplia experiencia en adolescencia, familia y pareja. Durante más de veinte años, ha acompañado a jóvenes y sus familias en procesos terapéuticos, brindando orientación para afrontar los desafíos emocionales de esta etapa.
Puedes contactar a Gus Bas aquí.