Cuidar de uno mismo no es egoísmo, es un acto de amor para poder seguir acompañando.
¿Qué cambia cuando dejas de hacerte cargo de todo?
¿Puedes darte el permiso de ser feliz y cuidarte cuando alguien a quien amas está sufriendo?
¿Qué haces con la culpa que te consume por dentro?
Eva nos comparte su recorrido vital como hija de una madre con trastorno bipolar y contesta estas preguntas.
Siempre ha convivido con la inestabilidad emocional, la incertidumbre y el rechazo que rodea muchas veces la salud mental en el entorno familiar.
Como niña sintió la necesidad de cuidar a su madre hasta que se dio cuenta de que ese lugar de salvadora la desgastaba profundamente.
En este episodio Eva nos cuenta cómo su instinto de supervivencia la llevó a pedir ayuda y nos comparte las pautas que a ella la ayudaron a soltar la culpa cuando dejaba a su madre en manos de terceras personas y se ocupaba de ella y de su propia vida.
Desde este nuevo lugar acompaña hoy a su madre: con amor, con confianza, poniendo límites y con respeto hacia la vida de ambas.
Este testimonio nos invita a reflexionar sobre hasta dónde llega nuestra responsabilidad como familiares y nos muestra que la verdadera fuerza está en reconocer nuestros límites y respetarlos.
Eva nos habla de la gran ayuda que recibió de los servicios de la Unidad de hospitalización parcial en el domicilio, en Barcelona. Aquí te dejamos el enlace.